Si tienes frecuentemente, inflamación, dolor estomacal, episodios entre estreñimiento y diarrea o, tal vez, ¿una combinación de todos los anteriores?; entonces puede ser que tengas el síndrome de intestino irritable. Las causas posibles son: Alergias o intolerancias alimentarias, Desequilibrio en la flora intestinal, Estrés, Deficiencia de magnesio, Falta de enzimas digestivas, Ácido estomacal débil, y alimentación poco saludable.
Para ayudar a mejorar los síntomas de este padecimiento te dejamos algunas recomendaciones, como el consumir agua, germinado, tener meditación diaria, tomar jugos de verduras y comer alimentos crudos. Evita lácteos, gluten, haz a un lado el estrés, alimentos procesados, alimentos picantes, cafeína y alcohol. Recuerda que el cambio es progresivo, no te abrumes cambiando todo al mismo tiempo, comienza con lo más sencillo y verás que los resultados te animarán a seguir.