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Recordemos que la salud de las organizaciones dependen de la salud en su concepto más amplio de cada uno de sus integrantes. Es muy importante la estabilidad emocional de las personas, sobre todo cuando tiene personal a su cargo. Por lo tanto es importante entrenar al trabajador mediante una capacitación dirigida a conocer las fuentes de su estrés, determinando qué tanto es generado por las condiciones del trabajo y cuanto es producto de su propia forma de recibir las situaciones.
Una asesoría completa a los empleados para el manejo efectivo del estrés, debe ir encaminada no solamente a reducir los síntomas del estrés mediante la clásica relajación, como una forma única, sino que además, debe encaminarse a atender las causas de tipo organizacional que lo provocan, aprendiendo a mejorar la comunicación y las relaciones humanas en el trabajo, previniendo los conflictos, reduciendo la resistencia al cambio y planeando adecuadamente el trabajo en equipo. El enfoque debe ser preventivo y reeducativo, más que curativo, la clave es el desarrollo de actitudes y habilidades positivas, con el fin de disfrutar y realizarse mediante el trabajo, pero no padecerlo.