El consumir jugos de fruta y verdura parecería un método adecuado de alimentación, ciertamente utilizamos productos naturales y sanos. La problemática radica en dos puntos principalmente, al realizar un jugo quitmaos la fibra alimentaria dejando solo los azúcares y también necesitamos mayor cantidad del fruto para poder lograr una ración.
Con los licuados surgen diferentes dificultades, un volumen denso de la bebida, esto quiere decir nutrientes concentrados y el riesgo a comer más, por esa creencia y gusto por incluir muchos ingredientes, como leche, jugo, frut, cereales, oleaginosas, azúcares y hasta algún suplemento.