No es prevenible, sin embargo, hay factores desencadenantes como la infección o parasitosis, lo cual se trata de un gusano que suele penetrar en el apéndice y provocar obstrucción con una posterior inflmación, aunque es una de las causas más bajas que se presentan. Aunque el apéndice no tiene ninguna función vital en el organismo, no es recomendable extraerlo de manera incidental, ya que cuando el apéndice está sano y se opera puede generar una herida contaminada.